Muchas parejas pasan años y años juntas y finalmente, un día, deciden tomar la decisión de casarse. En cambio, hay otras que no se deciden nunca… Cuando el paso es firme y la motivación por hacerlo es más que sólida, cuesta ver la perspectiva de los preparativos desde el ángulo adecuado.
A veces, damos prioridad a preparar todos los detalles que envuelven a la boda y nos olvidamos de lo más importante: el ¿por qué? ¿Te has parado a pensar en ello? ¿Te habías hecho esta pregunta? Tómate una taza de café o de té mientras lo reflexionas…
Desde Your Wished Wedding te damos los consejos más personales para que toméis la decisión adecuada. Cuando las parejas deciden casarse, creen que lo hacen con el amor de su vida, así que no vamos a entrar a juzgar ni a razonar en temas del corazón… Si nos paramos a pensar ¿qué es el amor?, lo podríamos definir de mil y una forma. Según la RAE, la definición que más nos gusta es la que apela al: “Sentimiento hacia otra persona que naturalmente nos atrae y que, procurando reciprocidad en el deseo de unión, nos completa, alegra y da energía para convivir, comunicarnos y crear.”
Dónde sí queremos que pares a pensar es en el porqué y en el cómo. A parte de formalizar una relación legalmente, que puede ser muy útil al formar una familia o para cualquier trámite, casarse tiene una serie de privilegios y derechos que pueden proteger a la pareja en un futuro. Pero realmente, la pregunta que te tienes que hacer es: ¿Por qué me quiero casar? ¿Qué es lo que me hace tan feliz? Una vez lo tengas en mente, escríbelo y guárdalo. Guarda ese papel, como si fuera el más preciado de tus tesoros; el que te recordará siempre el porqué quieres hacerlo. Y de vez en cuando, en el momento en el que el estrés se apodere de la relación, léelo. Cierra los ojos y siente cómo ese sentimiento de amor vuelve hacia ti.
Luego ya te puedes parar a pensar y soñar en el cómo: ¿Cómo te imaginas ese día tan especial? ¿Solos los dos? ¿En una boda íntima con la familia directa o amigos? ¿En un acantilado? ¿En el lugar donde os conocisteis? ¿En vuestro primer lugar de vacaciones? Como ves, existen millones de posibilidades. Déjate llevar un poco e imagínate cómo te gustaría hacer realidad esta aventura tan apasionante que empieza ahora.
¿Te apetece contármelo? ¡Soy todo oídos!
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